Saturday, February 23, 2008

little fear

Se sienta donde le indicó el agente federal Mark Smith. setenta y cuatro pasajeros le acompañan en el avión alquilado por el Gobierno Federal de los Estados Unidos para trasladarlos a Santo Domingo, todos acababan de cumplir sus condenas y eran regresados país. Los tenian agrupados de acuerdo a su delito. Robo a mano armada en la primera sección, en total catorce; luego violencia doméstica: nueve; Tráfico y posesión de drogas: treinta y ocho; evasión de impuestos: tres; y allá en la última fila, solo y sin nadie mas con un crimen similar, Juan Antonio Peguero Rivera.

Nadie en esos vuelos conversa, o va al baño o pide una Coca-Cola. Todos estan con la cabeza baja, algunos duermen, otros miran hacia atras y ven al pasajero solo, aislado. Unos comentan que tiene que ser un terrorista, que trabaja para Al-Qaeda. Esas teorias son refutadas por algunos de los del grupo.
-A lo terrorista lo trancan y lo torturan, ma nunca lo sueltan.
-El dominicano no es pendejo para ponerse una bomba y explotarse en un tren.
-Solo él sabe porque lo tienen allá atrá.

Aterrizan y no hay aplausos. Se suben las camisetas para taparse la cara de los periodistas que los acosan con sus cámaras, a Juan Antonio no le importó la situación. Los deportados son conducidos a diferentes cuartos donde le toman los datos y les llenan una ficha para seguimiento. Es dificil insertarse de nuevo en la sociedad y no dedicarse a los mismo crimenes por los que pagaron condena, mas aún en estos paises pobres donde el hombre honrado, honesto y trabajador pasa muchas calamidades.

Pasan unas semanas y Juan es llamado para trabajar en una oficina como mensajero, es lo único que ha encontrado. La coordinadora de recursos humanos le pasa una carta con los requisitos finales para su ingreso: Dos fotos dos por dos, copia de la cédula, copia del acta de nacimiento de sus hijos, si los tuviese, debe hacerse un examen médico y carta de no antecedentes judiciales. Tragó en seco dos veces cuando leyó esa línea.

Se levanta temprano. Lleva en sus manos sudorosas la carta de la empresa para que le hagan sus análisis. La misma clínica donde hace algunos años, no recuerda cuantos exactamente, se hizo los chequeos médicos que le solicitó el Consulado Américano para el proceso de solicitud de residencia. Juan Antonio espera su turno pacientemente, como lo esperó para comer, caminar, bañarse mientras estaba en la carcel. Quince minutos sentado no se comparan con los siete años que duró cumpliendo su condena. Examen de la sangre, orina, heces fecales. En el baño orinó sin problemas pero no pudo defecar.
-Cuando vuelva a traerme la muestra debe traerme una nueva indicación, pase buen día.

Dando la vuelta a la esquina está la fiscalia. Copia de la cédula, trescientos ochenta pesos servicio VIP. Que aparecerá en la hoja que le entregarán? Si colocan debajo de su foto: Deportado por tal crimen, lo aceptarán en el trabajo? La idea de dedicarse a delicuente le causó un nudo en el estómago, ahora si siente ganas de defecar. Se sienta en uno de los bancos del parquesito situado detras de la Fiscalia a esperar por su certificado.

En los columpios un grupo de niñas jugaban. Su vista se perdió en aquella niña con falda corta y bluza azul. Le miraba las piernitas, los pechitos que se asomaban, su carita de niña tierna. Cuando el columpio la llevaba hacia adelante sentia en su pecho un apretón, es que sin querer la niña mostraba el color rosa de su ropa interior infantil. Juan respiraba profundo, varias veces pasó su mano por su pantalón, por su entrepierna especificamente. Y la niña se balanceaba inocentemente, arqueaba su cuerpo y mas mostraba. Juan baja la cabeza, aprieta los puños y recuerda aquel tiempo que pasó en la carcel por no resistirse ante Katt Loren, la joven de quince años que lo acusó de haberle tocado sus pechitos y sus partes íntimas en el baño de la escuela donde era profesor.

13 comments:

Nikkei-Girl said...

El problema de la pedofilia es un mal social, que está cada vez más cerca de nosotros. Mi pregunta es, ¿todos esos años de encarcelamiento logran apacigüar o re-moldear esa perversión? No me gusta generalizar, pero como este ejemplo, hay muchos.

Hoy más que nunca hay que estar cautos, nunca se sabe.

Anonymous said...

tira el libro ya... cuando te decidas ire a comprar una copia, piensalo.

DrLacxos said...

Mierda!, me llegó, alfonso con todo respeto!, esta ha dio una de las mejores!, mierda!, de verdad viejo saca el libro!

Unknown said...

El perro huevero aunque le quemen la boca, sigue comiendo huevos....

Cuando uno tiene hijos les cambia la mente, al final solo pense en mi hija....

No quisiera ni tener la mas remota idea de que algo parecido le pase a mi hija, porque de verdad que no sé lo que le haría ese HDSMM

Anonymous said...

Oh Lord... Very deep...

Unknown said...

tu sabes, a esos malditos q hacen cosas asi deben de castrarlos antes de mandarlos.

rosie said...

Dios, que fuerte! Ni la condena en la carcel y ni psicologos pueden con este mal. Esto no tiene cura...tristemente. ahy que tener los ojos bien abiertos. Ni a mi peor enemigo me gustaria que le hicieran tal cosa. Solo pienso pienso en mi bebo. Que Dios nos guarde por que todavia no hemos visto todo

luima said...

perro huevero

GirlFromSantiago said...

Once a marine, always a marine...

Lola Vásquez said...

Diablos!! es algo tan vil, tan..uuff!!..de solo pensarlo e imaginarlo me dio asco!!...asi que buen cuento!!!

..escribe mas!!

Karolyn said...

Y como es el sistema Judicial aqui probablemente consiguió el papel de buena conducta...me uno al grupo que comprará el libro.

Jenniffer G. said...

Si en el avion se enteraban de que era un pedofilico...Iban a aplaudir pero encima de el.

Es una lastima que en la sociedad se vean tantas filias, tantas manias, tantas bainas malas.

E'te mundo se ta' acabando.

Alfonso tu estabas en miami por el 2006? porque yo viendo tus fotos, como que vi a alguien similar a ti en diciembre del 2006 en el aeropuerto de miami. quizas este equivocada, pero como que me llego ese recuerdo. A lo mejor no eras tu, pero iba en el mismo avion pa sto dgo :D. Bueno, no me hagas caso.

Anonymous said...

Me llegó esa palabra a la mente de una vez: Maniático!!!

Por eso yo vivo poniendo clara a mi hermana y una prima que vive cerca de mi, porque esos "verdugos" cuando se les meten una carajita entre ceja y ceja (o como se diga), no hay pa' nadie.