Saturday, September 19, 2009

El estado chongo

Ojalá mi corto vocabulario me permita describir cada sensación, cada detalle de lo que siento por ella. He anotado todo detras de la receta para varias pastillas e inyecciones por mi anemia. Anemia, anemia, tiene que ver con ánimo? Porque el mio está por el suelo.

Desde que ella entró por vez primera por esa puerta mi vida ha sido diferente. Recuerdo como me sudaron mis manos y mi axila derecha, mi nerviosismo quedaba al descubierto por una gran mancha en mi camisa.

Y obviando las artimañas que hice para llamar su atención, ella está a mi lado hoy, descansando, durmiendo una siesta en mi casa luego de largos momentos de sudor, fricción y besos de lengua con fluidos.

Ella está ahí con los ojos cerrados, reponiendo fuerzas, llenandose de energías para abusar de mi, para castigar el cuerpo y complacer el morbo. Mi mano no se aguanta y se pasea por su piel, en toda su extensión, buscando la humedad que emanaba su sexo minutos atras.

Quiero que mi corazón se acelere, quiero que la sangre corra a un solo lugar, quiero quedarme sin aire, quiero sentirla encima de mi, quiero verla respirar agitada, quiero descargar todo esta lujuria y desintegrarme en sus brazos.

Ella abre sus ojos, negros como la noche, infinitos como el universo, su mirada es deseo, sus caricias pasión. Sin intercambiar palabras beso su espalda de principio a fin y la hago mia y me hago suyo.

Buenas intenciones

Hoy un grupo de jóvenes se reunen para una jornada de limpieza de playas. Grupos de empresas apoyan la causa, a menos así aparece en la prensa. Es muy loable que lo hagan pero es un gran esfuerzo desperdiciado, es un granito de arena que se perderá en el azul de nuestras aguas.

Tomar un día del año para recoger la basura que otros han depositado todo el año es beberse un calmante porque nos duele el brazo roto. El que ensucia los hace por asqueroso o ignorante. La solución no es recoger, es no tirar. Educar, vigilar las playas, dotarlas de tanques para colectar desperdicios, enseñar a las comunidades sobre el daño que le causan a las costas, castigar severamente a las empresas que ensucian con sus desperdicios.

Felicito a todos los voluntarios, ojalá alguien se anime y con estos mismos muchachos se organicen campañas de educación y orientación, así el esfuerzo dejará mas frutos, de no ser así nos veremos cada año llenando fundas negras de foam.

Thursday, September 10, 2009

República M

Los que leen la prensa extranjera pueden percatarse de que el cuco de cualquier servidor público es la opinión pública, lo que pueda pensar de ellos la sociedad civil, los ataques que pueda recibir de la prensa, en fin, la reacción de los votantes en general.

Desde presidentes que han renunciado a su cargo hasta dar explicaciones sobre lo que hizo con una jovencita a puertas cerradas, la verguenza de ser descubiertos en un acto que atente la ética y el buen funcionamiento dentro de su cargo los hace mantenerse por la línea o cubrir bien sus faltas.

En nuestra República M (Use su imaginación) ese miedo no existe. No existe ese miedo al poner a la novia de su hijo a trabajar en su dependencia (Si quería ayudar, Por qué no la hizo gerente en su oficina privada?), no existe al tener un cocinero pago por la institución que comanda (y tener supervisores de motoconcho), no existe ese miedo al decirle a un periodista que a su papá nadie lo saca de su nómina. No gana lo suficiente sr. Diputado para ayudarlo con su sueldo?

No, no hay miedo de hacer lo-que-me-da-la-maldita-gana-soy-un-diputado-coñaso. No hay miedo en decirlo en voz alta, no hay miedo en que yo, tú, él, nosotros y vosotros leamos en un periódico de circulación nacional :"que lo sepa la opinión pública que tengo a mi papá y nadie me va a sacar a ese viejo que come de su hijo, ni Valentín me lo saca".

Nos han convertidos en mojones cuya única forma de defendernos se da cada cuatro años, para colmo, la quieren extender a seis.