Dominican Power.

No me sentia con las ganas de decir que estaba orgulloso de ser dominicano, aunque suene muy comemierda, pero es la verdad. De lo que si estoy orgulloso es de la gente, del pueblo, de los que día a día salen a sudar los granos, así como lo oyen, para ganarse el sustento diario.

A lo largo de la historia hemos sido castigados por la ambición, por la corrupción, por el deseo de creerse dueños de un país cuyo recurso principal es su gente. No abundaré mucho en historia desde la colonia, no hablaré de dictadura, pero si analizamos el daños que nos han hecho nuestros presidentes despues de la caida del jefe, es increible que estemos en pie y funcionando.

Tenemos un estado fallido. No nos suplen las necesidades de agua, luz, transporte, educación, salud. Nos roban, cada gobierno es lo mismo, han hecho de este país un barril sin fondo, una mina para los funcionarios de turno, y me consta.

Nos castigan con impuestos, ISR, el ITBIS, comisión cambiara, el porcentaje de los cheques, coño que impositivo es nuestro sistema. El dominicano se faja, trabaja, tira pa'lante, siempre tratando de mejorar su calidad de vida, de comprar una casa, de comprar un carro, de pagar un pagaré, de llevar arroz con huevos a su casa.

Pero nos castigan, nos manda a acostar a las doce porque no pueden agarrar a dos o tres maleantes, al que se roba la luz lo meteran preso, pero no hacen nada con las distribuidoras. Nos meten un metro por el ojo del culo y hay niños que van a las escuelas a sentarse en el piso. Ponen wifi en la ciudad y sacar un acta de nacimientos es perder un día.

Que mal, que mal que los que nos gobiernan no son Dominicanos, no pueden serlo, no piensan en nosotros. Nos tienen abandonados, mierda el paisito este, que los dominicanos somos los buenos, somos los de los cojones.