A good bye

Debería existir una compañía que se encargue de hacerle las maletas a uno, meter el t-shirt azul de modafoca, las chancletas y los sombreros sin que se maltraten en un bulto junto con pantalones, libros, lapiceros, pantaloncillos, medias y mis chancletas. Que maldición, hoy me llaman todos a decirme que buen viaje, que un abrazo, a todos los quiero, pero que joder, me amargan este viaje, me agrian el deseo de irme a nuevas tierras, a un nuevo trabajo, a un olor a calle diferente.

-Loco, palomo, como te va??
-Contadme palomo!!!!

Nos fuimos a dar la última vuelta por la zona, en chancletas of course. Le dije que maneje alpaso, casi abrí la puerta del carro para llenar mis pulmones una vez mas de smog, del rechín de los vendedores de jugo, de salitre rancio. Nos reunimos en un barcito abandonado con un grupo que nos esperaba, hablamos mierda sobre la mierda y entre Brugal y Brugal, recordé que el vuelo era a las seis y con las nuevas medidas anti-9/11 habia que estar bien temprano.

Llame un taxi, no queria despedirme de nadie, no queria que nadie sintiera pena porque me fui. Llegué, me registré, pasé mis maletas, no objetaron el ron. Camine hasta el gate a esperar la autorizacion final para entrar al tunel del tiempo que me llevará a la siguiente dimension. Aproveché y la llamé y le dije que hoy no iba a poder verla, que mañana hablamos, otra mentira mas. Grupo H, Grupo G, el mio.

Desde que me senté me coloqué los audifonos, no miré por la escotilla. Una vaca me decia adios por la ventana, mientras tanto un salamí de contrabando detenia el avion en medio de la pista. Seis militares, un fiscal, un observador. Fuimos invitados a bajar del la aeronave para fines de investigación. En Burger King veo los aviones partir, les digo adios desde la ventana, talvez otro día, en otra época, en otro lugar, it's not time to say goodbye.